Calabaza Espagueti Con Salsa De Tomate Y Albahaca
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Esta receta de espagueti de calabaza con salsa de tomate y albahaca es una alternativa deliciosa y baja en calorías a la pasta tradicional. Incluye espagueti de calabaza asada cubierta con salsa casera de tomate y albahaca, lo que ofrece una comida nutritiva y sin gluten que no escatima en sabor.
Ingredientes
- 1 calabaza espagueti mediana
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cebolla, finamente picada
- 3 dientes de ajo, picados
- 1 lata (14 oz) de tomates triturados
- Un puñado de hojas de albahaca fresca picadas
- Sal y pimienta para probar
- Queso parmesano rallado (opcional para cubrir)
Instrucciones
- Asar la calabaza: Precalienta el horno a 400°F (200°C). Corta la calabaza espagueti por la mitad y quítale las semillas. Rocíe con 1 cucharada de aceite de oliva y sazone con sal y pimienta. Coloque el lado cortado hacia abajo en una bandeja para hornear y ase durante 40 minutos o hasta que estén tiernos.
- Prepara la salsa: Mientras se asa la calabaza, calienta el aceite de oliva restante en una cacerola a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo y sofríe hasta que estén transparentes. Agregue los tomates triturados y cocine a fuego lento durante 20 minutos. Agrega la albahaca picada y sazona con sal y pimienta al gusto.
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Servir: Una vez que la calabaza esté cocida, use un tenedor para raspar el interior y crear los "espaguetis". Cubra con la salsa de tomate y albahaca y queso parmesano rallado si lo desea.
Información nutricional
Calorías: 200 por porción
Proteína: 4g
Grasa: 9g
Carbohidratos: 28g
Fibra: 6g
Azúcar: 12g
Beneficios de la salud
- Bajas en calorías: La calabaza espagueti ofrece una alternativa baja en calorías a la pasta tradicional, ideal para controlar el peso.
- Alto en fibra: Tanto la calabaza como los tomates tienen un alto contenido de fibra, lo que ayuda a la digestión y proporciona una sensación de saciedad.
- Rico en vitaminas: Rico en vitaminas A y C, que son importantes para la función inmune y la salud de la piel.
- Salud del Corazón: El aceite de oliva y los tomates contribuyen a la salud del corazón por su contenido en grasas saludables y licopeno, respectivamente.